El regreso de Simone Biles a la competición de gimnasia fue revelado por su ex

HOFFMAN ESTATES, Illinois – Comenzó de manera bastante inofensiva, como material en un podcast de la NFL a fines de mayo.

El esposo de Simone Biles, Jonathan Owens, había firmado recientemente un contrato con los Green Bay Packers, y había surgido un clip en las redes sociales de la gimnasta corriendo juguetonamente con el receptor abierto de los Packers, Christian Watson, por un tramo de césped en una fiesta del Día de los Caídos. En el podcast Pick Six, al ex quarterback de la NFL Brady Quinn se le preguntó, en esencia, quién pensaba que ganaría en una carrera real.

"Quiero decir que Watson es rápido, así que diría que tiene ventaja en este caso, pero..." dijo Quinn, haciendo una breve pausa. "No sé si esto es público o no, pero Simone Biles vuelve a competir".

Para el fanático promedio de la NFL, esto habría parecido una revelación extraña viniendo de Quinn, el ex mariscal de campo de Notre Dame y selección de primera ronda de los Cleveland Browns. Pero quienes conocen la vida personal de Quinn tomaron nota; su esposa es Alicia Sacramone Quinn, líder estratégica femenina de USA Gymnastics.

"¿Le preocupa en absoluto haber dado noticias sobre gimnasia estadounidense en el podcast Pick Six aquí en CBS?" El coanfitrión Will Brinson le preguntó a Quinn entre risas.

"Ups", respondió con una sonrisa.

Un mes después, Biles fue presentada formalmente como parte del campo para el US Classic de este fin de semana. Y antes de su regreso a la competencia el sábado, le preguntaron a Alicia Quinn por primera vez sobre las consecuencias de ese podcast y si su esposo fue realmente quien dejó salir al proverbial gato de la bolsa.

"Lo hizo", dijo con una sonrisa. "Fue un shock, por decir lo menos".

Biles, de 26 años, no ha competido en dos años después de que problemas de salud mental y una serie de giros la llevaron a retirarse de la mayoría de sus eventos planeados en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021. Y la comunidad de gimnasia ha pasado gran parte de esos dos años preguntándose cuándo regresaría y si regresaría.

Antes del podcast, solo había rumores de que Biles había regresado al gimnasio, o breves vistazos de ella en el fondo de las fotos en las redes sociales. Gimnastas como Zoe Miller, que entrenó junto a la cuatro veces medallista de oro olímpica en Texas, dijeron que hicieron todo lo posible para mantener en silencio su posible regreso.

"Podría contarle a mi familia y esas cosas", dijo Miller. "Es todo una cuestión de respeto, respetar sus deseos".

Incluso en medio de la creciente sospecha de que Biles estaba entrenando nuevamente, no hubo confirmación de que Biles quisiera competir.

Luego, Brady Quinn hizo su aparición en el podcast del 30 de mayo.

"Estábamos como un pequeño día libre para los padres", dijo Alicia Quinn el viernes. "Entonces (un periodista) me envió un mensaje de texto y le dije: 'Eh, eso es raro'. No pensé nada en eso. Y luego recibo otro mensaje de texto y otro mensaje de texto y me pregunto: '¡¿Qué hiciste?!?!' (Brady) dijo: '¡Yo no hice nada!' "

Efectivamente, sin embargo, había soltado la sopa.

"Él no pensó que estaba haciendo algo malo, simplemente estaba emocionado", continuó Alicia Quinn. "Porque, como todos ustedes probablemente podrán imaginar, nos encanta la gimnasia en nuestra casa y Simone es una de las favoritas de mis hijas. Fue simplemente un desafortunado desliz".

Alicia Quinn, quien ganó cuatro campeonatos mundiales durante su carrera en gimnasia, dijo que luego habló con Biles sobre los comentarios de su esposo. Cuando se le preguntó cómo se manejaba la noticia en su hogar, ella objetó.

"La forma en que manejamos las cosas en mi casa no es asunto de ustedes, sin ofender, así que lo mantendré como algo personal", dijo riendo. "Es desafortunado porque sé que cada atleta quiere poder anunciar su regreso o su intención de practicar su deporte en su propio tiempo y lugar".

La moraleja de la historia? Alicia Quinn dijo que Brady no llega a conocer más secretos.

"Maridos", dijo Quinn, sacudiendo la cabeza. "No se puede controlar lo que dicen".

Comuníquese con Tom Schad en [email protected] o en las redes sociales @Tom_Schad.